rasgos de personalidad, como por factores externos, incluyendo la información recibida a
través de los medios, experiencias traumáticas pasadas o el aprendizaje indirecto a partir de
personas cercanas. (13)
En cuanto al consumo de golosinas y azúcares, un 85% de la muestra consume
refrescos, galletas, golosinas o pasteles todos los días, lo que indica un alto consumo de
azúcar en la dieta infantil. El azúcar, especialmente la sacarosa, posee la capacidad de
promover la colonización de microorganismos y provocar incrementación de la placa
bacteriana, lo que permite su unión a los dientes en mayor volumen. (14). Las
recomendaciones dietéticas que tienen un impacto significativo en la prevención de las caries
incluyen evitar el consumo excesivo de alimentos azucarados y pegajosos, consumir
alimentos ricos en proteínas y fosfato, ya que ayudan a mantener la saliva con un pH más
alcalino; incorporar una dieta abundante en fibra, verduras y frutas con alto contenido de agua,
las cuales favorecen la limpieza bucal y estimulan la producción de saliva. (15)
Las respuestas de los niños encuestados acerca de la importancia del cepillado reflejan
diferentes niveles de conciencia sobre la salud bucal. La mayoría de los niños relaciona el
cepillado con la prevención de la pérdida dental, dejando en segundo plano la preocupación
por evitar dientes amarillos y la prevención del mal aliento. Por esta razón, es esencial
comprender su prevalencia en la población infantil. Este problema, frecuente y asociado a
alteraciones en la salud bucal, ha sido poco estudiado en Ecuador, especialmente en relación
con los factores de riesgo en niños. (16)
Dentro de las encuestas realizadas a los padres, se refleja la variedad de tratamientos
odontológicos mencionados por los padres, los cuales expresan diferentes niveles de cuidado
y prevención en la salud bucodental infantil. La mayoría de los padres llevaron a sus hijos al
dentista en los últimos seis meses, lo que refleja una actitud generalmente positiva hacia el
cuidado bucal infantil. Los padres y tutores juegan un rol fundamental en la prevención de
enfermedades en sus hijos, ya que son los encargados de inculcar hábitos de higiene bucal,
como el cepillado diario y la visita temprana al dentista. (17)
Los resultados de la encuesta reflejan los hábitos y criterios de elección de los padres al
comprar y reemplazar cepillos dentales para sus hijos. Los cepillos manuales son eficaces si
se usan correctamente, aunque sería útil educar a los padres sobre las diferencias entre
cepillos manuales y los eléctricos y sus ventajas, especialmente para niños con dificultades
de cepillado; en un estudio realizado por Orellana et al. (18) Se resolvió que los cepillos más